7.17.2005

ψ

Continuando con el minuto psycho, hoy toca un liviano comentario en referencia al trastorno esquizoide de la personalidad.



Resulta que en general para hacer un diagnóstico de trastorno de la personalidad el individuo debe cumplir con una serie de requisitos, - es lo que me «
fascinó» de la psiquiatría, siempre tan objetiva y oficinesca. Estos ítems van orientados a identificar alteraciones en áreas como la cognición, la afectividad y la actividad interpersonal. Pero para hablar más concretamente de lo que nos ocupa, el patrón de comportamiento del individuo debe regirse por:
  • Tendencia a eludir relaciones interpersonales íntimas y duraderas
  • Carencia de mecanismos de adaptación. Uso del retraimiento
  • Frialdad emocional, distanciamiento o aplanamiento de la afectividad
  • Disfruta con pocas o con ninguna actividad. Ni desea ni disfruta de las relaciones interpersonales incluido el formar parte de una familia
  • Sus vidas no parecen ir a ninguna parte

Para mí, acá no hay ningún trastorno y si lo hay, no es necesario un psiquiatra/psicólogo para tratar esto. Acá lo que hace falta es un
sociólogo que se haga cargo del problema que se inventa la sociedad con gente que simplemente no se aisla porque quiere, que no es pesimista, sino que más bien se entera de lo pésimo que está todo en general.

4 comentarios:

David Motta dijo...

Yo cumplo unos cuantos requisitos pero no tengo trastorno de personalidad, esa es mi personalidad, no me gusta la gente confianzuda, no me gusta mostrar mis sentimientos y cuando llego a un nuevo sitio soy retraído. Que argumentos tan basuras para catalogar a una persona como enferma. un saludo

wakalani dijo...

a mi lo que me parece sinceramente tirado de los cabellos, es que tenga que estudiar esto minuciosamente y con toda la objetividad de la que adolece! no quiero ni saber cuando me toque rotar psiquiatría! pobre personal de sala!

Anónimo dijo...

La verdad es que es difícil distinguir las enfermedades mentales de las enfermedades sociales... y hasta qué punto unas causan a las otras. Ahora que está tan de moda ir al psicólogo y al psiquiatra a la primera de cambio, me gusta recordar el título de aquél libro (tan famoso como malo): "más Platón y menos Prozac"...

wakalani dijo...

Muy cierto. Lo peor es que de un tiempo para acá hay una fijación con el tema de la tolerancia, que ahora todos somos transigentes y todos comprendemos que las llamadas "enfermedades mentales" son, como las somáticas producto de factores biologicos, sociales y psicológicos. Lo cierto es que hoy nadie se burla de un diabético, nadie aparta a un hipertenso como segregaría a un depresivo, un ansioso, un "enfermo mental" cualquiera.