La impotencia es como una autopista con destino a la desesperación. Rápidamente creo que empiezo a acercarme a ese peligroso punto en el que decides que las cosas que antes eran consideradas importantes ya no lo son tanto y puedes pasar de muchas de ellas, incluso en contra de tus más arraigados principios
Y en verdad, no suena bien pero lo cierto es que a fuerza de impotencia y de algunas otras pocas cosas estoy al borde de ampararme bajo el paraguas de lo alternativo y de hoy en más cuando en un turno* me llame algun personal de salud (sea lo que sea) para atormentarme con las agonías y aflicciones es algún paciente, acudir presta, no con un esfigmomanómetro en mano, sino con un manual de Reiki y de sanación espiritual. Si algo no funciona siempre podrá ser atribuído a la falta de fe de alguna de las partes.
*guardia, para nuestro publico internacional
11.11.2008
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